miércoles, 31 de diciembre de 2008

duda

A Muriel

porque aún nacen de la mirada

y los abismos de la ignorancia balbucean

y el dedo entre los labios cae en la duda

y los brazos encrucijan la espera

y los rechinidos de la ausencia reclaman

porque se siguen apareciendo de la mirada

y no hay ceguera que pueda con cada uno de mis recuerdos

tuyos

martes, 23 de diciembre de 2008

MERCI?

NOCHE naciente de tonos rojizos sobre al lago Leman, despues de haber caminado por la vieja Ginebra de plena noche para no ser la escepcion, son las ocho y un cuarto de hora y voy de regreso hacia a zona comercial para pasar por Muriel a su trabajo, ella trabaja de recepcionista en un hotel cercano a la estación de trenes, hace frio, leo El arte de la fuga, ya casi acabo, me faltaran treinta paginas a lo mucho, busco un lugar donde acabar de leer el libro, pero decido mejor llegar al hotel y terminarlo ahi, Muriel me llama por telefono celular y me pide que vaya que está muy aburrida, un domingo por la noche se traduce en naderias de trabajo, la veo desde afura ella con la cabeza sobre el mostrador, sólo ha leido un artículo sobre la migracion rumana a otras naciones,-está muy aburrido todo- me dice antes de besarme mientras cruzo la puerta, me pregunta sobre mi paseo nocturno, le digo las calles que recorrí, le cuento que una pareja joven en la calle al venir al hotel me preguto en frances por la ubicación de un Mcdonalds, yo fingiendo un avezado ingles británico les actuo un: ohhh yeah!, frase inical y después todo se desplomo con un espanlglis dudoso. Ella al contarle la anecdota rie y me dice que aún no acaba y que debemos esperar al suplente, yo decido entonces esperar en la sala del hotel los minutos que la restan a su turno, continuo leyendo el levantamineto armado en Chiapas en el 94, las suposiciones de Pitol me dan mucha risa, creo que especular al final se vuelve siempre en algo cómico.
Pensba en eso cuando entonces alguien llega al hotel, escucho la voz de Muriel hablando de cantidades y dias de la semana, de repente en el pasillo que no es muy grande, aparece un hombre renco hablando por telefono celular y mirando con duda de inspector a todos lados, una chamarra bombacha de piel, y sus manos dentro de las bolsas me recuedan el frio que hace allá afuera; especulo que el hombre es frances por lo que alcanzao a escuchar de la conversación telefónica, llega hasta la sala donde leo, y comineza a desenrrollar la serie de foquitos electricos del árbol de navidad artificial que adornaba la sala frente a mi, comineza por la punta, e inicia mi risa interna tambien a desdoblarse, una suerte de malabarismo, el pie derecho torpe o inmovible se clava en la alfombra para no perder el equilibrio, al inicio lo logra, pero como no deja de atender llamada por celular sólo utiliza una mano, sesquimalabarismo, yo aplaudo y espaculo: quiza es el administrador, o es un trabajador de limpieza, o alguien que decido que la navidad había acabado tres dias antes. Él mientras tanto coninua por la parte baja del árbol haciendo formas corporales que no podria yo imitar, se tambalea y dos esferas comienzan a decolorar la escena ahora es un tanto trágico, el hombre está en el suelo en cuclillas, hablando por celular aún y liberando los foquitos uno a uno de las ramas artificiales, perece que se va a caer pero logra el equlibrio, un tirón más y ya estara libre la serie, se pone de pie lentamente gira para darle la espalda al árbol despojado y al mover su ancla, su pie, le provoca un desequilibrio que la gravedad lo arrojaría de espaldas hacia el arbolito, aqui no especulo y me lanzo pues estaba a unos metros de él, y lo tomo del brazo y evito el espectaculo, no se cayó pero estuvo muy cerca, el cojo malabarista me gradece-merci, merci- escucho en un francés que parece balbuceo, no respondo nada y regreso a mi asiento, mi buena obra del día, pienso satisfecho; el renco ahora camina por la sala y mira lo cosas que hay muy a la mano, ahora lo sé, mi perspicacia es avasalladora lo he descubierto?, un ladron malabarista. Por lo tanto ahora finjo leer y le sigo con la mirada, él ahora un poco intimidado me da la espalda para lograr esconder su botín, no es el único robo ahora alcanzo a otear. Segunda parada, qué hacer, pienso un poco y decido esperar a que salga.
Mientras tanto ya ha llegado el reemplazo de Muriel, el renco huye ahora tomando dulces de la recepción, es tambien el momento justo de preguntarle a Muriel sobre el renco, la respuesta es que ni ella ni su suplente lo conocen, mi sospecha es cierta, por lo tanto le explico a Muriel lo que he visto y ella a su vez le explica al suplente, un negro alto e impactante, él me pide más detalles, regresamos a la escena del crimen, reconstruyo la historia como me he aprendido de los peritos mexicanos, el negro sale a la busqueda del malabraista, yo lo sigo, salgo dle hotel miro hacia todos lados pero lo pierdo de vista y regreso, Muriel me dice que no es la primera vez que roban así, yo le digo que quiza es la primera vez que veo un grinch en vivo y en directo, el supente negro regresa con el botín recuperado y con una sonrisa en la cara, me da la mano, le tomo la mano, él dice: Merci. Yo asiento. Mi segunda buena obra del día. Salimos del hotel, y en el tranvia le platico con más detallles a Muriel sobre mi proeza, ya en la casa imito el malabar, por supuesto inimitable, pero ella rie y aplude irónica, yo sólo digo: Merci.

viernes, 19 de diciembre de 2008

dia y noche en Ginebra

en cada nube del alba

dentro la habitación que es una cama

respiran los golpeteos de todas las madrugadas

y en medio de la plaza

las ginebrinas calles están fuera de sí,

y mis pasos extranjeros cascanuezan las baldosas

una ave toda negra acarrea la bienvenida

a graznidos de campanas

a aleteos que tintinean,

quién se esconde en las aristas de cada ventana encerrada?

nunca en el paso de su imagen

nunca en las plazas desiertas

nunca en las alas de cisnes

nunca en badajos de campanas

en cada nube del ocaso

la habitación que es una hamaca

respiran aspiraciones de todas las madrugadas.

jueves, 18 de diciembre de 2008

L'etabli

Las posibilidades de ver el día en Ginebra, paradójicamente, han ido variando en horarios con el paso de los días. Las noches, desde mi llegada, se han convertido en la manera de conocer la ciudad, no es la mejor, pero es la adecuada, la búsqueda de claroscuros en la pareja es fundamental y Ginebra tiene varios verticales, he visto comer y deglutir personas entre luces y oscuridades. Salgo a la calle, en su mayoría de las veces en la tarde casi noche, esta vez no es la primera pero con el frío se me antoja siempre algo caliente, donde están los puestos, los xiringuitos, un pozole o un sope, de menos un taco mal servido con grasa por aquello del frío, pero bueno nada eso, entramos Muriel y yo a un bar L'etabli, algunos amigos de Muriel dentro del lugar ya nos esperaban, una par de hermanos suyos , que no son sus hermanos, pero que ella los estima de esa manera, pero decía que entramos, sin lugar en una mesa amplia de madera vieja y una banca del mismo material, a mi lado, un húngaro que imita a los hispanohablantes asintiendo con en ceceo y una rostro pensativo y de mofa, es bueno ver la mofa ajena, es como si un simio imitase al gorila y este imita el rugido del león, que imita a una ardilla y una ardilla imitando un gato. Muriel me presenta a unas personas una francesa y un finlandés, el sonido de la lengua finlandesa es extraña. bebo un te para cazadores, sabe muy bien, platico con un suizo con mi escaso inglés y su escaso español pero creo que nos entendemos. Me invitan a jugar dardos en el segundo intento le doy al centro, suerte de principiante, dejamos los dardos y miro el lugar gente vieja, un francés con una pipa y una nariz muy grande, me imagino yo cazador y quiero más te, no, creo que prefiero una cerveza, bebo, bebo, bebo, creo que me comienzo marear, me preguntan por México y no miento, creo que ahora la verdad es una gran mentira para cualquiera de ellos, fumo de la cajetilla de una amiga francesa, todos beben y ahora creo que los entiendo un poco más se habla español, francés, italiano, alemán suizo . Se divide la mesa, mitad hombres hablando de política, y la otra mitad mujeres hablando en alemán suizo, aún no entiendo demasiado pero de vez en cunado escucho Mexiko, o Mex, entonces una amigo de Murii me dice en un español lento y dudoso creo que hablan de ti. Se acaba la ultima ronda de cerveza y nos vamos, la casa esta a dos cuadras, la noche es muy suiza, y llegando a casa la noche será día, toda suiza y cada vez más.

lunes, 15 de diciembre de 2008

todo tiene un comienzo

comencemos pues con la premisa de que usted desea encontrar desde un plano metodologico cualquiera, una interpretacion y por tanto una apropiacion y receacion de una secuencia filmica, y es que el mayor problema es hallar un elemento ejemplar, pues dado que se pretede demostrar lo aprendido: toma fija, encuadrando dos terceras partes de una pared en donde se recarga el escritorio con varios libros varios en ingles, más en alemán, un diario local Le Courrier, se llama, a la izquierda un sillon medio desarreglado, un silla junto al escritorio varios títulos sobre la mesa de centro, Piglia, por su arte para la fuga, Larva de Julián Ríos, El soldado de Salamina recién recibido, porque Paris no se acaba nunca, es necesrio leer a Bolanyo su Nocturno Chile, y como no podía faltar , uno de poesía Raúl Renán. Días en al espera de las noches. la premisa se aborta, no se ha conseguido mayor cosa que presentar una habitación como cualqueir otra, en cualquier parte del mundo. Lo ejemplar del caso está bien a bien, en la transformación de usos horarios. el día y la noche se colocan al inversa, tras la puerta, nadie que no haya visto la noche dentro del dia, el día a plena luna, con abrir y cerrar una puerta, nadie podrá decir que h vivido..ni siquira amigo Deniz, si has conocido a Tolhausen.