a nosotros
no parece que la luz haya caido
se detiene
resquebraja aquel espacio oscuro que la tinta olvida
en el trazo
ya no escribes desde hace tiempo
desde hace espacio
desde hace frío
desde hace niebla en la cabeza
desde el recuerdo agusanado
en la esquina,
o mejor omitido donde da vuelta la calle y no regresa:
un limosnero con la cara limpia y un reloj amarillo
su dedo señala la hora con insistencia
lo que parecía un verso libre
está en la mazmorra de la luz que no cae
aunque no escribes
alguien lo hace por ti
desde hace tiempo, y casi a diario.